Porsche remata el apellido Turbo

Hace un tiempo, los modelos más prestacionales de las marcas llevaban el apellido "Turbo", básicamente porque, a diferencia del resto de la gama, iban sobrealimentados. Porsche era una de esas marcas.

Cuando veías un 911 con la palabra Turbo en sus laterales o en la trasera sabías que se trataba de un coche con una buena dosis de "chicha" bajo el capó. Era una especie de advertencia para los demás, algo así como las letritas al revés de las ambulancias.

Por desgracia, en la era del marketing, la marca de Stuttgart ya le había robado parte de la exclusividad al seguir denominando "Turbo" a sus modelos más prestacionales aunque no se distinguiesen del resto de la gama por ir sobrealimentados, pues toda la gama disponía de motores con turbocompresores.

Al menos nos podíamos conformar con que, efectivamente, eran motores Turbo... Hasta ahora.

Como sabéis, Porsche está desarrollando su primer modelo 100% eléctrico, llamado Taycan, que deriva del precioso concept-car Mission e.

Pues bien, en un alarde de "porque yo lo valgo", los de Stuttgart han decidido que va a existir el Taycan Turbo. Así es, amigos, un eléctrico "turbo". Ya habían matado el significado, ahora lo rematan.

Obviamente no va a llevar ninguna caracola acoplada al motor, no existen gases de escape que la pudieran hacer trabajar. Que la realidad no te estropee un buen titular, se suele decir.

Si vivimos en una época en la que todos los coches son deportivos, coupés, shotting brakes, todo-terrenos, ecológicos, inconformistas, pasionales, urbanitas y chics, todo a la vez, ¿por qué no iba un eléctrico poder ser "turbo"? Total, ya hay desatascadores turbo.

No sé si es mi lado friki de la ingeniería, si es que me hago mayor o qué, pero estas cosas no las entiendo, y dudo que vaya a entenderlas nunca.

En fin, feliz año a todos.